Por Angie Larenas
Según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en el Artículo 26, la educación es un derecho. Por ello se señala que:
- Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental…
- La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales…
Sin embargo, en el mundo existen millones personas sin acceso a la educación. Y la dificultad para llegar a ella ha tenido y tiene un claro componente de género.
Por ejemplo:
- Renate Schüssler, en 2007, escribía que en Perú el 17 % de las mujeres es analfabeta, frente al 6% de los hombres. Esta proporción se eleva en zonas rurales y pobres. Pero la exclusión la viven, sobre todo, las mujeres de los pueblos autóctonos y que tienen una lengua distinta al español.
- En Haití, para el año 2012, la población de mujeres con al menos la educación secundaria terminada era del 22,5 %, mientras que la de hombres era el 36,3%. Es bastante subrayable la diferencia con el resto de América Latina y el Caribe, donde 49,8% de las mujeres y el 51,1% de los hombres tenía la educación secundaria concluida.
- En Afganistán, según cifras del Ministerio de Educación afgano citadas por Humaira Haqmal, en 2012 8,39 millones de niños y niñas iban a la escuela, de ellos el 39% eran chicas y 61% chicos.
Independientemente de las diferencias de los ejemplos expuestos, de los matices que puedan acompañar a las cifras, está claro que la violación del derecho básico a la educación tiene un impacto diferenciado según el sexo.
En este sentido es importante destacar la relevancia del enfoque de género en la educación. Esto quiere decir que en las políticas relativas a este tema debería ser imprescindible tener en cuenta la diversidad de elementos que permiten la reproducción de las desigualdades de género.
Se trata de elementos tales como la pobreza, la cultura, la discriminación, el racismo, la segregación, la inseguridad, el machismo.
Un objetivo claro en materia educativa sería enseñar para superar el sistema de relaciones humanas jerarquizado y masculinizado en el que nos hemos educado y en el que educamos.
Para profundizar:
Haqmal, Humaira, La situación de la educación de las mujeres en Afganistán.
Nota informativa sobre Haití, The Rise ofthe South: Human Progress in a Diverse World.
Schüssler, Renate, Género y educación. Cuaderno temático.
No hay comentarios:
Publicar un comentario